El candidato a diputado provincial mencionó el impacto que esa medida, junto con una apertura indiscriminada de la economía, tendría en Mar del Plata.
El exintendente Gustavo Pulti, candidato a diputado provincial de Unión por la Patria, afirmó este viernes que dolarizar “es inconstitucional” y sostuvo que le quitaría “vida” al sistema económico, con repercusiones locales como una menor cantidad de turistas y un incremento de la desocupación.
El dirigente de Encuentro Marplatense mencionó que, en el artículo 75, la Constitución fija las atribuciones del Congreso de la Nación. “En el inciso 6 le otorga la responsabilidad de establecer y reglamentar un Banco Central facultado para emitir billete. En el inciso 11 lo hace responsable de hacer sellar moneda y fijar su valor. Y en el 19 fija expresamente que debe proveer todo lo necesario para la defensa del valor de la moneda”, precisó.
En caso de implementarse una dolarización, “en vez de eso estaríamos supeditando la moneda a una autoridad extranjera, que es la Reserva Federal de Estados Unidos”, alertó. Por su parte, el Banco Central, en lugar de tener el rol que le asigna la Constitución, “pasaría a ser una mera agencia regional que funcionaría en representación de la estadounidense”.
Pulti insistió en que “con la Constitución vigente en la Argentina no se puede dolarizar la economía”, y recordó que hoy solo hay cuatro experiencias en el mundo de economías dolarizadas: las de Ecuador, Panamá, El Salvador y Zimbabue. “Ninguno de esos cuatro países son países que hayan llegado al desarrollo económico a través de la dolarización”, señaló.
“Por el contrario, las tensiones sociales, las dificultades y los problemas se ven con solo recordar lo que pasó en estos días en Ecuador: fue asesinado un candidato a presidente, otros fueron a votar con chalecos antibalas y casco y hay inestabilidad social”, describió.
La experiencia más parecida en la historia argentina, marcó, es la de la convertibilidad. “En esos diez años, merced a la relación ‘un dólar-un peso’, era más barato veranear en Miami o en cualquier país del mundo que en Mar del Plata. Eran años en que llegaban a Mar del Plata 5 millones de turistas; ahora llegan más de 8 millones, casi 9. Es decir que supone un 50% menos de turistas”, comparó. “Las consecuencias –acotó– se vieron en la desocupación. No solo afectó a la actividad turística, sino también a la industrial.
Esa “perspectiva dolarizadora” siempre viene acompañada “de una apertura indiscriminada de la economía”, consignó. “En aquella década tuvimos índices de desocupación del 18 al 24,5%. Hoy es del 4,9%”, contrastó.
Pulti aseguró que con estas medidas propuestas por “el liberalismo” lo que se logra “es lo contrario de lo que se busca: un supuesto descenso de los síntomas inflacionarios a costa de quitarle vida al sistema económico, de quitarle vitalidad, y eso se traduce en chicos que no encuentran trabajo en la ciudad, empresas que se cierran, carteles de venta de los comercios, consulados con cola, algo que Mar del Plata ya vivió”.
Por caso, indicó que a la industria textil ese sistema “la expone a competir de igual a igual con los productos indumentarios de China, que produce el 40% de las indumentarias del mundo, así como con países como
Indonesia, Myanmar o Bangladesh, que tienen estructuras de costos completamente distintas”.
En este marco, Pulti consideró que “lo que se les está proponiendo a los argentinos de manera engañosa es que a través de la dolarización va a haber una fórmula mágica que va a generar trabajo e inversiones”. Puntualizó, en cambio, que “el gran desafío de la Argentina desarrollar y multiplicar la base cualitativa de la economía para resolver los problemas, incluso el inflacionario, a través del trabajo y la producción”.